Cuando se cumplen dos años de la primera protesta, la Asociación de Patinadores de Madrid (APM) ha convocado una manifestación bajo el lema “#PorUnMadridPatinable y #MadridCentral, ni un paso atrás en la lucha contra la contaminación”
Alrededor de 500 patinadores se manifestaron el pasado viernes 21 de junio con una marcha sobre patines por las principales calles de la ciudad, que comenzó tras la lectura de un manifiesto frente a la fachada del ayuntamiento de Madrid.
En el manifiesto reclamaron la continuidad de medidas contra la contaminación como son las zona de bajas emisiones de la ciudad o Madrid Central, y que además favorecen la integración en las vías de medios de transporte sostenible como el patinaje:
“Como patinadores urbanos somos un colectivo más sensible que otros a los niveles de contaminación generados por el tráfico motorizado en la ciudad. Por eso, en esta ocasión, queremos añadir a nuestra habitual lista de reivindicaciones, la petición de que no se den pasos atrás en medidas que reducen la polución. Medidas que han demostrado su eficacia en los últimos informes de medición de niveles de NO2 en Madrid.”
Con esta manifestación, que desde hace dos años reúne mensualmente a la comunidad de patinadores de Madrid, la APM reclama que la capital se abra a autorizar la Madrid Friday Night Sake, una marcha mensual sobre patines por las calles de nuestra ciudad, al igual que se realiza en el resto de ciudades españolas y europeas.
La marcha se desarrolló a lo largo de un recorrido de 15 kilómetros por las principales calles de la ciudad. La policía municipal estuvo acompañando a la marcha durante todo recorrido, parando el tráfico rodado únicamente durante el paso de la marcha. Aparte de la policía municipal, la organización cuenta con voluntarios (stoppers) que ayudan a que no haya incidentes, o avisan de los posibles peligros que pudieran presentarse durante el recorrido.
La marcha finalizó frente al ayuntamiento, y el grupo de manifestantes se disolvió sin mayor percance para el resto de los ciudadanos.
Desde la Asociación de Patinadores de Madrid queremos dar las gracias a todos los patinadores que han hecho posible esta manifestación.
Nunca se recuperó totalmente de semejante trompazo y cada vez se encontraba más enferma e incapacitada. Se cree que quedó completamente paralizada a excepción de su mano derecha y que algunas partes de su cuerpo “se desprendieron” (lo que hacen algunos por perder peso…). También se dice que la sangre brotaba espontáneamente de su boca, nariz y oídos, por lo que los habitantes de Schiedam creían que estaba bajo la influencia del diablo.
